El Chelsea inglés es el segundo rival del Atlético de Madrid en esta fase de grupos de la Champions League. Después de una primera jornada donde los ingleses goleron al débil FK Qarabag y el Atlético empató en Roma, aunque mereció sumar los tres puntos de manera solvente, el partido del Estadio Wanda Metropolitano coge una importancia bastante alta, aunque no sea decisivo. Los expertos futboleros equiparan al equipo londinense y al Atlético, defendiendo la seriedad defensiva de ambos, el gran comportamiento táctico de sus pupilos y una letal salida a la contra. Así pues y con todo ello trataremos de profundizar un poco más en los «Blues».
Un ídolo en la portería del rival
Hablar en exceso del guardameta rival no tiene mucho sentido cuando te estás dirigiendo a lectores atléticos y el nombre del jugador en cuestión es Thibout Courtois. El cancerbero belga defendió durante tres temporadas los palos del entonces estadio rojiblanco, el Vicente Calderón. Siempre quedará en la historia del Atlético por haber sido titular en la conquista de la décima Liga, en la Europa League de Bucarest o por sus dos distinciones como portero Zamora en 2013 y 2014. Su seguridad, su altura y sus reflejos hicieron de él una leyenda rojiblanca. Es titular indiscutible, pero si se produjera algún contratiempo, otro viejo conocido de nuestra liga esperará desde el banquillo, el ex del Elche o del Málaga Willy Caballero.
Conte ha instalado el 3-5-2 con el que triunfó en la Juve
Era verano del 2011 cuando Antonio Conte se hizo cargo del equipo donde cuajó sus mejores años como futbolista, la Juventus de Turín. Llegó al equipo transalpino con la idea de jugar un 4-4-2 pero las características de sus jugadores le hicieron replantearse la téctica. La denominada «BBC» (Barzagli, Bonucci y Chiellini) en el país vecino parecía ser un trío de defensores excelente y Conte varió su idea de juego pasando a formar con un 3-5-2. Desde entonces el ahora técnico Blue se encandiló con el sistema y lo trasladó tanto a la selección italiana como ahora a su Chelsea. Con esta fórmula suele tener una lína del centro del campo muy fuerte, acaparando todos los espacios de lado a lado.
Fichajes sin tanto nombre pero de mucho empaque
El ya mencionado Wily Caballero (llegó gratis pocedente del Manchester City), Zappacosta (el lateral ha aterrizado desde el Torino para competir con Victor Moses y con un previo pago de 27,10 millones €), Bakayoko (firma tras ganar la Liga Francesa con el Mónaco. Más músculo para acompañar a Kanté. Con la presencia de ambos Conte buscará centrocampistas que ejerzan una presión alta y le hagan la cobertura a sus carrileros cuando estos se prodiguen al ataque. Su fichaje ha supuesto 40 millones de €), Rüdiger (35 millones de € desembolsados en las arcas del AS Roma por el central alemán. Con él se busca tener un cuarto central de garantías tras Cahill, David Luiz y Azpilicueta), Drinkwater (el centrocampista mancuniano llega desde el Leicester como reemplazo en de Matic después de pagar 38,10 millones de euros) o Álvaro Morata ( delantero centro procedente del Real Madrid por 80 millones de €. Su misión es hacer que la hinchada no se acuerde de Diego Costa). Estas han sido las principales incorporaciones del Chelsea durante el pasado mercado de fichajes, además de algún que otro jugador que ha regresado tras su exitosa cesión como es el caso de A. Christensen que dejó una sensación excelente entre los aficionados del Borussia M’gladbach.
Con todos ellos más los Ederson, Cahill, Azpilicueta, Marcos Alonso, Víctor Moses, David Luiz, Willian. Pedro, Hazard, Cesc Fábregas o Michy Batshuayi estamos ante una plantilla muy compensada y con un nivel competitivo espectacular. Las posibilidades que tiene Antonio Conte son infinitas, pero teniendo en cuenta el tipo de sistema que suele utilizar y los equipos que viene sacando vamos a tratar de ver donde pueden estar las claves de este partidazo.
Los posibles puntos claves para decantar el encuentro
- El duelo en las bandas: si se ve desde la perspectiva rojiblanca, el hecho de que los ingleses salgan con tres centrales y dos carrileros puede provocar espacios más que interesantes para ser aprovechados por los atacantes del Atleti. Carrasco, Griezmann o Correa pueden aprovecharse de ellos. Mirándolo desde el lado inglés, la banda de Hazard y Marcos Alonso podría ser realmente peligrosa y más viendo que posiblemente ahí esté el único punto bajo lupa dentro del once rojiblanco. La movilidad del belga pudiéndose dejar caer entre los medios y la defensa puede marcar el devenir del choque.
- Evitar las contras: es algo muy a tener en cuenta por ambos lados. Se conocen bien y saben que tanto una delantera como la otra son muy rápidas y si tienen espacios pueden decantar el marcador.
- Lucha en el centro del campo: los londinenses parece que apostarán por el músculo. Si ya con Kanté en el once no hubiera suficientes piernas para correr y hacer el trabajo menos vistoso pero trascendental en el fútbol, a él habrá que añadir a Bakayoko. Esta es la opción más probable aunque la incursión de Cesc Fábregas para lanzar las contras no queda del todo descartada. Frente a ellos estarán Saúl, Koke y la duda es si también lo hará Thomas o será Gabi el seleccionado por el Cholo Simeone. A priori el Atlético llevará más la manija del partido por eso de ser local y esas cosas, por lo que quizá Thomas parta con algo de ventaja respecto al veterano capitán. El equipo de Simeone suele tener aquí su termómetro táctico y es la línea que suele marcar los ritmos de juego que más interesan a los suyos. La costumbre es la presión y un alto voltage, características similares a las de su oponente, por lo que la igualada parece primar en esta zona. Si no juega Cesc, es cierto que en global el Atlético atesorará mayor calidad en el medio.
- Adelantarse en el marcador: el que lo consiga, si es que lo hace alguno, tendrá una ventaja que puede ser vital en el partido. Ambos saben jugar muy bien con el marcador a favor y a los dos les cuesta atacar defensas cerradas. Todo hace pensar que los de Simeone saldrán a buscar la victoria desde el inicio pero no es para nada descartable un partido similar al de las semifinales de hace tres campañas, donde primaron el respecto y la falta de ocasiones de gol.