El pasado jueves cinco de abril se celebró en Bilbao «El FIBS» (Football International Bilbao Summit), un congreso futbolero que tenía como foco el próximo Mundial de Rusia. Los organizadores del evento, como ellos mismos decían, buscaban que el Campeonato del Mundo se jugara por un día en la ciudad vizcaína. Para lograr trasladar ese espíritu organizaron un evento corporativo, donde había invitados de la calidad de Luiz Felipe Scolari (ex seleccionador de Brasil), Julen Lopetegui (seleccionador español), Xabi Alonso (ex internacional español) o Roberto Martínez (selecionador de Bélgica). A continuación tenéis sus sensaciones de cara a la cita que comienza este próximo mes de junio.
Luiz Felipe Scolari (Campeón del Mundial de Corea y Japón 2002 como seleccionador de Brasil)
Cuando un campeón del mundo habla toca dejarlo todo y escuchar. Luiz Felipe Scolari no es uno más en el fútbol. El ex seleccionador de Brasil llegaba a Bilbao para contar cómo administró el grupo con el que salió campeón en Corea y Japón 2002. «Felipao» se sintió tan cómodo que probablemente dijo más de lo que tenía pensado decir.
¿Crees en los estilos? Se habla mucho de que Brasil debe de seguir el suyo de siempre; de que el Barcelona ahora no es fiel al suyo, ¿qué opina de ello?
_ Para mí hablar de modelo estático en un equipo o selección es un error tremendo. El modelo te lo dan los jugadores, más allá de la institución. Yo fui el primero que le hizo jugar a Brasil con un 3-5-2. La selección siempre utilizaba el 3-4-3 o el 5-4-1 pero yo tenía futbolistas para jugar de otro modo. Cafú y Roberto Carlos eran carrileros y debía de potenciar esto. Se me critió al principio pero cuando vieron que funcionó salí vencedor.
Se criticaba mucho a lo conocido como “La familia Scolari». ¿Qué tal le sentaba esto al seleccionador?
_ Lo más duro fue salir de Brasil desacreditado. Mucha gente no creía en nosotros por no llevar a los jugadores más vistosos. Muchos de los jugadores que llevaba no eran los mejores técnicamente, pero me ayudaban a formar un grupo bien organizado. Si te llevas a todos los jugadores de un perfil técnico luego no sabes como colocarlos. Como dice el nombre yo debía de seleccionar a los que creía que me iban a aportar mejores cosas y por ello traté de buscar compensar el bloque. Creo que lo contrario es un error.
El 1-7 recibido a manos de Alemania fue un duro golpe para Felipao
Usted salió Campeón del Mundo en Corea y Japón, pero también recibió la mayor goleada que se recuerda en unas semifinales de un Mundial, ¿Qué sintió después de aquel encuentro?
_ Fue muy difícil. El fútbol tiene estas cosas pero el aficionado no ve más allá. Solamente lo malo, pero ¡estábamos de nuevo en la semifinal de una Copa del Mundo!.
¿Qué es lo que más te ha costado hacer en un Mundial?
_ Me costó mucho convencer a Rivaldo de jugar de punta izquierda. Van Gaal le ponía en un sitio y yo le necesitaba en otro. Para mí el mejor jugador del Mundial 2002 fue él y lo hizo en la posición en la que le necesitaba el equipo. Los organizadores se lo otorgaron a Ronaldo pero para mí no me cabe duda de que Rivaldo fue el mejor. Se lo dije al “Fenómeno” y aunque no lo reconoce se ríe siempre con uña sonrisa cómplice.
¿Cuál es la decisión más difícil que ha tenido que tomar Luiz Felipe Scolari como entrenador?
_ Sin duda la que más he meditado fue la de elegir a Ronaldo y dejar fuera a Romario, que era un ídolo brasileño y aunque era mayor estaba jugando bien. Sin embargo yo tenía mucha fe en «El Fenómeno». Ronaldo venía de jugar dos partidos nada más con el Ínter de Milán. Él vino y se me confesó, me dijo que él no estaba siendo Ronaldo porque le faltaba aún tras la grave lesión. Hablé con su médico y me comentó que en treinta días sería el verdadero Ronaldo. Yo sabía hasta donde podía obligarle y aunque la gente podía hablar otras cosas, tanto él como yo estábamos coordinados para que fuera alcanzando su mejor versión.
¿Es una ventaja o es un hándicap ser anfitrión en una gran cita?
_ La gestión de la presión es fundamental. Para mí jugar un Mundial fuera es mucho mejor. En el último parecía que íbamos a ganar seguro y sino se acabaría el mundo y esa presión extra no la tiene el resto. Además estamos hablando de Brasil, un país donde el fútbol es la máxima religión.
¿Qué opciones se le presentan a Scolari en un futuro próximo?
_ Tengo varias propuestas y decidiré pronto, en los próximos meses. Me han salido cosas interesantes y me seduce una idea de entrenar a un equipo de la Premiership con vistas a poder ascender.
Con la experiencia que acarreas en el fútbol oriental, ¿consideras que China será candidato al campeonato del mundo en un periodo de tres o cuatro mundial?
_ China está comenzando ahora un proyecto, pero no le veo capaz de ser campeón del mundo a medio plazo, ni siquiera a ser candidato. Tienen leyes que son erróneas. Al final acabarán acudiendo regularmente a los mundiales porque son muchos millones de habitantes y están comenzando a dar los pasos, pero les queda mucho para aspirar a algo más. Han establecido leyes proteccionistas como que no puedan haber porteros extranjeros o que no haya tres jugadores de fuera para que crezcan sus jugadores.
Julen Lopetegui (Seleccionador de España)
El mandamás de «La Roja» hizo una charla donde tenía como tema principal la presión y cómo soportarla, pasando luego a otros aspectos que suponen la previa de un campeonato de este calibre.
¿Piensa que la presión en un Mundial es mayor de la que sufre normalmente un futbolista profesional?
_ La presión va a existir, es algo inherente de una Copa del Mundo. Se juega cada cuatro años y hay muchas ganas, pero hay que tomárselo desde el lado positivo.
¿Cómo hace Julen Lopetegui para tener al jugador metido en épocas en las que pasa mucho tiempo sin haber convocatorias internaciones?
_ Me gusta estar pendiente a diario. No tenemos tiempo de intervención en la selección. La gente se piensa que solamente interactuamos con los chicos cuando estamos con ellos y es una mentira ajena a la realidad. Nos gusta estar muy cerca de las sensaciones de nuestros jugadores en el día a día. Tratamos de hacerlo y creo que el jugador lo agradece. Yo intento estar muy cerca del futbolista. Hoy en día hay tecnología para ello. A veces te juegas dos partidos importantísimos con un solo entrenamiento, por lo que el papel previo es trascendental.
El sorteo del grupo se lleva a cabo con siete meses de antelación al inicio. Usted como seleccionador, ¿prepara esos partidos en las siguientes convocatorias o lo hace partido a partido conforme le van tocando?
_Una vez que conocimos los rivales los hemos ido viendo más para tratar de plasmar los matices. Sin embargo, yo no puedo preparar los partidos del grupo teniendo como tenía dos citas ante Alemania y Argentina. Pensar más allá del siguiente encuentro lo veo contraproducente. No puedo hablarle al jugador de las características de los rivales distintos al siguiente. Con ello no quiero decir que no conozcamos a las selecciones contra las que nos enfrentaremos en el grupo, porque evidentemente desde el cuerpo técnico se les viene estudiando.
Si se da el caso de que su selección gana los dos primeros partidos, ¿es usted de pensar en los posibles enfrentamientos en consecuencia a sus propios resultados?
_ A mí no me gusta hacer cábalas para intentar forzar un cruce. A veces se han visto casos en los que teóricamente a un equipo le toca otro que a priori era más asequible y después le ha echado.
Más allá de la selección, de Rusia y de fútbol internacional, uno de los periodistas presentes le cuestionó a Julen si se sentía el padre futbolístico de Casemiro, jugador del Real Madrid al que le dio la oportunidad de dar el salto en su etapa como entrenador del Oporto.
_ No me siento padre de ningún futbolista. Me encontré con un chico apasionado, con ganas de aprender y de crecer y nosotros nos aprovechamos. El único responsable de su crecimiento es él mismo. Entendió perfectamente su rol y sus posibilidades.
Roberto Martínez (Seleccionador de Bélgica)
El español es actualmente el seleccionador de los «Reds Devils». Los belgas acuden a Rusia con un cartel de favoritismo mayor al de citas anteriores. El hecho de que muchos de sus futbolistas estén en grandes equipos europeos provoca que los entendidos coloquen a Bélgica en la terna de las selecciones que pueden dar la sorpresa. A pesar de todo, para Roberto Martínez la presión no cree que juegue un papel decisivo.
_ No creo que haya una presión añadida en un Mundial, sino que es al revés. Hay un sentimiento de querer disfrutar por representar a tu nación. A nosotros lo que más nos preocupa es el jugador que viene con presión de su club y no le sepamos transmitir que aquí les queremos liberados de la misma.
Julen Lopetegui dijo que le gusta estar cerca de sus jugadores, ¿qué piensa usted al respecto?
_ Al igual que Julen el papel de estar cerca aunque estés lejos del jugador es clave. El futbolista debe de acudir a la selección y no tener la sensación de extrañeza, sino de confortabilidad.
La calidad y la cantidad de jugadores belgas ha experimentado un crecimiento importante en los últimos años. ¿En qué se basa el seleccionador de Bélgica para conformar la lista de los 23 elegidos?
_ Estoy muy de acuerdo con Scolari en que no los 23 mejores forman el mejor equipo. Yo le doy mucha importancia al grupo. En este tipo de campeonatos se convive las veinticuatro horas y si tienes algún tipo conflictivo va a repercutir para mal en el conjunto. Hay que mirar muchas cosas a la hora de tomar la decisión de a quien llevas.
Roberto Martínez comenzó utilizando un sitema y decidió cambiarlo, ¿por qué?
_ El día del debut contra España me abrió los ojos. Vi que no tenía laterales y cambié del 4-4-2 al 3-5-2. En Bélgica no tenemos laterales pero sí que teníamos gente que se podía adaptar al puesto de carrilero muy bien.
¿Le preocupa algo a poco más de sesenta días para el comienzo?
_ Sí, tenemos un problema grande atrás. Por un lado está Thomas Vermaelen, que aunque no juegue tanto yo le veo bien. Está fuerte. Lo más preocupante para nosotros es el caso de Toby Alderweireld que no está jugando nada en el Tottenham.
¿Y Carrasco? El jugador sale del Atlético de Madrid rumbo a China por falta de minutos, debido teóricamente a su falta de espíritu defensivo. Usted ahora lo utiliza de carrilero, pero, ¿cómo le convences para que juegue ahí cuando el jugador siempre ha sido de tendencia ofensiva?
_ Yannick Carrasco es un jugador que sigue siendo muy joven, solamente tiene 24 años. Es un jugador muy receptivo y no le cuesta adaptarse a distintos roles. Sabe jugar al espacio perfectamente, sabe como defender situaciones de uno contra uno, como atacar para irse en el uno contra uno y a nivel de selección sigue siendo un jugador muy importante para nosotros.